LOS EFECTOS POSITIVOS DE SER POSITIVO EN EL CRECIMIENTO DEL LIDERAZGO

 Por: Moisés Solano Moraga

Coach de liderazgo, motivación y desarrollo personal, profesional y organizacional. Mi misión de vida es  preparar, acompañar e inspirar a personas para que se reinventen y alcancen su mejor versión. Coach, orador y entrenador certificado de John Maxwell.

Cómo convertirte en un líder positivo

 El pensamiento positivo se ha convertido en una palabra de moda en las discusiones de liderazgo de hoy en día. Se dice que es uno de los rasgos clave de los líderes exitosos. Una actitud positiva permite a los líderes superar la adversidad, mantener altos niveles de motivación y empoderar a sus seguidores. Este documento tiene como objetivo explorar los efectos positivos de ser positivo en el crecimiento del liderazgo a través de una revisión de la literatura y estudios de casos. Los hallazgos sugieren que la positividad es un componente crítico del crecimiento del liderazgo y puede conducir a un mejor desempeño, una mayor satisfacción laboral y niveles más altos de compromiso laboral.

 

Sobre el liderazgo positivo

El liderazgo es una cualidad valorada en la sociedad, ya que proporciona la visión, la dirección y el propósito de las organizaciones, las comunidades y las naciones. Sin embargo, no todos los líderes son positivos, inspiradores o efectivos para lograr sus objetivos. El objetivo de este artículo es examinar los rasgos, las habilidades y las estrategias necesarias para convertirse en un líder positivo que empodera, motiva y eleva a quienes están bajo su influencia.

 

Características de un líder positivo

Un líder positivo es alguien que posee una visión clara, convincente y basada en valores que inspira a otros a seguir. Esta visión debe comunicarse de manera auténtica, entusiasta e inclusiva, para que todos sientan que pueden contribuir y marcar la diferencia. Los líderes positivos también son empáticos, humildes y respetuosos con los demás, ya que reconocen que todos son únicos, valiosos y merecedores de dignidad y respeto. Esta mentalidad crea una sensación de seguridad psicológica, que permite a las personas ser creativas, innovadoras y colaboradoras sin miedo a las críticas, el rechazo o el castigo.

Revisión de literatura: 

Nuestra revisión de la literatura encuentra que ser positivo es un componente crítico del crecimiento del liderazgo. Un estudio realizado por Fredrickson y Losada encontró que cuando los líderes mantienen una proporción positiva de 3:1, un mínimo de tres declaraciones positivas por una negativa, es más probable que tengan éxito. Goleman descubrió que tener una actitud positiva puede ayudar a los líderes a superar la resistencia de sus seguidores. Se ha demostrado que la positividad conduce a niveles más altos de satisfacción laboral, mayor compromiso laboral y mejor desempeño. La literatura aconseja a los líderes que promuevan la positividad entre sus seguidores, ya que puede generar un ambiente de trabajo positivo y una mayor productividad.

Estudios de caso 

Los estudios de casos sugieren que la positividad es un componente crítico del crecimiento del liderazgo. Por ejemplo, un estudio australiano que examinó el estilo de liderazgo de los ejecutivos encontró que aquellos que mostraban positivismo en el lugar de trabajo tenían seguidores más leales que permanecían en sus organizaciones por períodos más largos. Otro estudio realizado por el gobierno del Reino Unido encontró que los líderes que eran positivos tenían más probabilidades de fomentar la creatividad y sus empleados estaban más comprometidos con el trabajo que hacían.

 

Habilidades de un líder positivo

Un líder positivo también debe poseer ciertas habilidades que le permitan traducir su visión en realidad. Estas habilidades incluyen comunicación efectiva, delegación, resolución de problemas, resolución de conflictos y toma de decisiones. La comunicación eficaz implica el uso de una variedad de medios para compartir información, solicitar comentarios y proporcionar comentarios. La delegación implica asignar tareas a personas en función de sus habilidades, intereses y disponibilidad, al mismo tiempo que les proporciona los recursos, el apoyo y la responsabilidad necesarios para tener éxito. La resolución de problemas implica identificar las causas fundamentales de un problema, generar posibles soluciones y evaluar su eficacia. La resolución de conflictos implica identificar y abordar los conflictos que surgen entre individuos, equipos, departamentos o partes interesadas, y mediar en una solución mutuamente aceptable. La toma de decisiones implica analizar datos, sopesar alternativas y emitir juicios informados que se alineen con la misión, la visión y los valores de la organización.

Estrategias de un líder positivo

 Un líder positivo también debe implementar ciertas estrategias que mantengan y mejoren su impacto positivo a lo largo del tiempo. Estas estrategias incluyen predicar con el ejemplo, desarrollar a otros, aprender y mejorar continuamente y fomentar una cultura de excelencia. Predicar con el ejemplo implica modelar los comportamientos, actitudes y valores que encarnan la visión de la organización. Desarrollar a los demás implica invertir en el crecimiento, el desarrollo y el bienestar de las personas, los equipos y la organización en su conjunto. El aprendizaje y la mejora continuos implican buscar retroalimentación, reflexionar sobre las propias experiencias y buscar nuevos conocimientos y habilidades que puedan mejorar la eficacia de uno como líder. Fomentar una cultura de excelencia implica establecer altos estándares, reconocer y recompensar los logros y crear un entorno que apoye y fomente el alto rendimiento.

Conclusión 

En conclusión, convertirse en un líder positivo requiere una combinación de rasgos, habilidades y estrategias que se alineen con los valores y objetivos de la organización, así como con las necesidades y aspiraciones de quienes están bajo su influencia.

Los hallazgos que he encontrado nos sugieren,  que la positividad es un componente crítico del crecimiento del liderazgo. Los líderes que mantienen una actitud positiva tienen más probabilidades de tener éxito y liderar a sus seguidores para lograr un mayor éxito. Al centrarse en la positividad, los líderes crean un ambiente de trabajo positivo que fomenta la creatividad y crea una fuerza laboral más comprometida. Los líderes que son positivos están mejor equipados para superar la adversidad y mantener altos niveles de motivación mientras capacitan a sus seguidores. Por lo tanto, recomiendo que ser positivo debe estar a la vanguardia de los programas de desarrollo de liderazgo en tu vida, tus programas de desarrollo en la empresa y espero que en algún momento en nuestros  centros educativos desde las primeras etapas, como parte indispensable de los programas educativos en nuestra América Latina. De hecho el avance del mundo ya lo exige y lo veo como algo que será inevitable si queremos que nuestros profesionales se adapten e impacten el futuro y transformen todo la avalancha tecnológica, en herramientas humanas que motiven e inspiren las vidas de los demás.

 Al desarrollar y demostrar estas cualidades, los líderes positivos pueden inspirar, empoderar y transformar a individuos, equipos y organizaciones en comunidades satisfactorias y de alto rendimiento.

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